¡Que chucho, Manucho!

A pocos minutos del cambio de mando en Chile tres sismos que se produjeron en el lapso de 20 minutos crearon alarma y temor entre los mandatarios, generando reacciones diversas. Al temor de los presidentes de Paraguay y Ecuador se sumaba un entusiasmado Evo Morales que como un chico manifestaba que siempre había querido saber qué se sentía con un sismo.

Ahora lo sabe.

El Principe de Asturias, sereno y pragmático,
apenas levantó la cabeza hacia el cieloraso.
Según dijo luego
al no ver correr a los chilenos se quedó en su sitio.
"Si ellos no salían del recinto es que no había nada
de que preocuparse."

La araña del salón era un péndulo frenético que daba testimonio certero de la magnitud del movimiento telúrico. Bastante estoica la reacción de los mandatarios que se quedaron allí como si nada.

Algunos estuvieron a tiempo de salir corriendo.
Yo no lo hubiera dudado.

Menos al presidente de Perú,
quien dijo estar acostumbrado,
y a Evo Morales, presidente de Bolivia,
que es quien mejor se lleva con la Madre Naturaleza,
por sus orígenes indígenas,
al resto tanto temblor no le hizo ninguna gracia.

No se cuántos hubieran comido
de no suspenderse el almuerzo.

¡Qué chucho Manucho!
* * *
Afortunadamente fue apenas un susto.
Un video sobre lo que aconteció en el cambio de mando
con los diversos temblores que conmocionaron a Chile