Cerca del Año Nuevo Chino

Se acerca el Año Nuevo Chino. El 26 de enero se va la rata y comienza el Año del Buey de Tierra. Ha llegado el momento de limpiar placares y hacer lugar en nuestras casas para recibir todo lo nuevo. Precisamente de eso hablamos el lunes pasado en el programa que Ana María* tiene en FM Dakotta 104.7 que lleva por nombre "Senderos del Despertar".

Es que en estos días los chinos realizan la “Limpieza de primavera” que tiene por objeto desbloquear el flujo del chi -energía vital presente en todas las cosas- en las casas para así alejar la mala suerte, la sensación de cansancio en quienes la habitan y cualquier tipo de perturbación psíquica y emocional en vistas al año que se inicia.

Todos somos más o menos conscientes de cómo la atmósfera de nuestras casas afectan nuestro bienestar físico, emocional y espiritual. Es el momento indicado para preparar un nuevo ámbito propicio que nos impulse a recomenzar con toda la energía.

Tiremos todo lo inservible, innecesario, gastado, o quebrado que tengamos en nuestras casas. Prestemos atención a que todo esté funcionando correctamente, canillas, pérdidas de agua, las luces, electrodomésticos, etc.

Revisemos los armarios y seamos implacables con la ropa vieja que no usamos. Prendas manchadas, decoloradas, que no volveremos a usar y que sinceramente no usamos en los últimos dos años son objetos de los que podemos deshacernos.

Tiremos todo aquello que acumulamos pensando que “algún día podrá servir”. Ese guardar “por si acaso” genera una energía ligada a la inseguridad, como si en el futuro cuando haga falta no lo voy a tener. Confíe en lo nuevo que vendrá.

Hay cosas útiles que no lo son para nosotros, no tenemos espacio para ellas y “todavía están como nuevas”. Regálelas, véndalas en mercado libre y despeje su casa. Regalos que le hicieron y usted no los usa porque no le gustaron, no los quiere. Así como aquellas cosas que le trae recuerdos tristes, le incomoda o evoca algún sentimiento desagradable. Eso debe salir, regalado, vendido o tirado a la basura.

Al limpiar nuestros espacios en forma orgánica sentimos cómo también limpiamos nuestras emociones, dejamos atrás lo que no resultó, nos liberamos de miedos, evitamos la confusión, combatimos el desorden que se lleva nuestra energía, creando espacio para lo nuevo que está por llegar.

Repitamos: Es bueno soltar. Al hacer espacio permitiremos que entren cosas nuevas en nuestra vida. Algo fundamental para terminar: evitemos las referencias al pasado. Pongamos toda la fuerza hacia el Año Nuevo y el nuevo comienzo.

* Ana María Aguirres es profesora de yoga y estará brindando clases al aire libre en el Lago de Palermo A partir del domingo 1/2/2009 de 8:45hs a 9:10hs - info@senderodeldespertar.com.ar-4782-7604