Bello Abril

Nos pasan tantas cosas en la vida, que si aparece el sol hay que dejarlo pasar... Abril, otra vez, para que no tengamos soledad. Y las violetas que coronan tu tristeza y las guirnaldas de tu inmensa soledad sos tan hermosa que jamás vas a dejar de brillar así aquí o allá... Sos parecida a los planetas que se mueven por ahí que no podés parar ya nunca de girar... Para que no tengamos soledad... para que no tengamos nunca más soledad... Fito Paez.

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Nombre: Abril Lech
Ubicación: Buenos Aires, Argentina

lunes, julio 23, 2007

Fotos en Red


Los comentarios que algunos muchachos dejaron en el post "Como Reinas" me acercaron este recuerdo. Hace algún tiempo un amigo mío me cuenta entusiasmado que conoce una señorita a través de Internet, ya no recuerdo si en uno de los tantos grupos de interés de Yahoo o Hotmail, o si por esas páginas de solos y solas.

Una de las cosas que le resulta más atrayente de la chica es que ella utilizaba su nombre y apellido para contactarse -no un nick- y una foto de sí misma. Para mi amigo la sinceridad es no ya una virtud sino una necesidad en las relaciones humanas. El caso es que luego de comunicarse varias veces deciden conocerse aprovechando un evento público.

Cuenta mi amigo que ni bien llegó al lugar comenzó a buscarla ansioso. Pero el tiempo pasaba y no la veía entre la gente. Pensó que tal vez se hubiera arrepentido, que le habría surgido un inconveniente de último momento o que -como él solía advertirle a sus hijas mujeres- le dió temor encontrarse con un desconocido. En esos pensamientos estaba cuando sintió en su bolsillo izquierdo que un mensaje de texto entraba en su celular.

Era ella. Con los nervios había olvidado por completo que ambos anotaron sus respectivos números. El mensaje de la chica decía: "Te veo. Estás al lado de la señora de saco verde. Yo estoy doce filas delante tuyo, a la derecha". Levantó inmediatamente la vista hacia ese sitio y vió una mano que se agitaba saludando dentro de un abrigo rojo. Saludó a su vez dubitativo. Pero sí, evidentemente era ella porque la mano saludó mas convencida aún.

Pidiendo permiso fue buscando el pasillo hasta quedar libre para adelantarse las doce filas que los separaban. Pero al acercarse comenzó a darse cuenta que la mujer que le hacía señas era en realidad la madre. Evidentemente la chica había sentido temor de conocer a un desconocido y envió a su mamá. Desde el pasillo y ya a nivel la saludo con la mano y preguntó por la chica.

-"Soy yo"- dijo ella sin ningún cargo de conciencia mientras se abría paso entre la gente hacia donde estaba él.

-No es posible...- le dijo mi amigo desde la punta del pasillo-La foto...

-Hola!- saludó ella con un beso desenvuelto- ¿Qué foto? ¡Ah! ¡La foto! Esa foto, ¿viste qué linda? Es mi preferida. Tiene como quince años. Pero conserva mi esencia. Intacta.

Mi amigo dió la media vuelta virtual y si bien por compromiso fue con ella a tomar un café ya estaba muy lejos del lugar del encuentro. La de la foto era otra mujer, más parecida a la hija que ésta no tenía y con una esencia parecida a la de quienes mienten descaradamente sobre lo superficial y lo profundo. Hasta aquí el relato de mi amigo, cuyo nombre omito porque, como bien sabe el Hippie Viejo, ante todo soy una dama y se trata de un Bloggero de la zona.

Ay! Ay! Ay! Con las fotos de los perfiles de la red. Nada mas engañoso que una foto. Si elijo un avatar, un dibujo, una representación geométrica, un paisaje o una imagen abstracta, es evidente que lo haré intentando manifestar alguna parte de mi personalidad, algo que puede tener que ver con mi esencia o con alguno de mis estados de ánimo.

Pero si elijo una foto, es un engaña pichanga adjudicarme la que me saqué cuando iba a la secundaria estando próxima a jubilarme. Porque la foto da idea de actualidad. De esta que soy yo ahora, me guste o no me guste.

Es así como en la red encontramos hadas pelirrojas que alejadas del monitor se transforman en señoras canosas. Esbeltas y deportivas figuras masculinas que caminan por la vida cotidiana portando pancita de jubilado y encorvados por los años. O princesas de cuentos infantiles convertidas en las brujas de esos mismos cuentos.

No hay caso. A veces las fotos son engañosas. Lo malo es cuando los engañosos son quienes eligen esas fotos.

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10 Comments:

Blogger fgiucich said...

Cuán difícil resulta asumir nuestro propia decrepitud y mostrarnos tal cual somos, en cuerpo y alma. Abrazos.

8:54 a.m.  
Blogger A. M. Vermon said...

Tranquila a tu regreso aprovechá paseo, no gastes tiempo de paseo, yo ya me quedo tranquilo.

11:20 a.m.  
Blogger Unknown said...

Mi querida Abril, tienes razón en que la red se presta a esos engaños y hay que andar con cien ojos, pero afortunadamente nunca pasé por una experiencia tan desagradable con las fotos... Hablando de fotos, no me cabe duda de que tú eres quien dices que eres y te diré que por tus fotos pienso que eres preciosa y tienes una sonrisa que es una maravilla. Un beso,
V.

3:21 p.m.  
Blogger A. M. Vermon said...

Con tu capacidad me gustaría que a tu regreso me mandes a mi mail (linea privada) tu analisis, crítica y concejos sobre mis canciones.
Coincido con el poeta que no todas tienen percha para mostrar entonces no se quieren privar de vivir una ilusión y muestran la imagen que idealizan y todo este sueño les ayuda a vivir a todo el mundo, los que compran el sueño también saben en el fondo recóndito de su corazón que no es fácil que Carla Conte les de bola y aquí la tienen al alcance de la mano y todavía si le dan el teléfono es probable que hasta "Carla Conte" te despierte y te diga vamos arriba que tenes que ir a la oficina .... Ahora te imaginas en un momento dado encontrarte con una monita como la de la foto que te clave los dientes en la yugular y te diga me amas??? yo le diría si si eres lo que he soñado, por favor dejame vivir ... no me mates...

1:47 a.m.  
Blogger jose fá said...

nos pasamos la vida tratando de satisfacer nuestros sentidos, el de la vista, si somos afortunados y contamos con èl, es uno de los màs consentidos... y creemos que la belleza es la imagen

perseguimos espejos (que nunca nos reflejan como somos)

Nunca me ha pasado ni he hecho pasar a nadie por algo como lo que cuentas (creo), pero sì te digo que cuando el proceso es a la inversa: conocer primero a la persona a travès de sus pensamientos, sus deseos escritos, sus miedos y goces... y su imagen llega despuès de eso, aquel ser humano te parece bello porque te parece bello... casi lo aseguro

9:58 p.m.  
Blogger Abril Lech said...

* Querida Josefa:

¡Verdad! El mundo nos asegura de todas las formas posibles que la belleza -de acuerdo a los parámetros publicitarios de moda- es EL SER cuando ni siquiera es SU IMAGEN.
Coincidimos en que hay una belleza trascendente que es la interna, la que forma parte de la ESENCIA de cada ser. La externa también tiene importancia porque es reflejo, sólo que no necesariamente tiene que coincidir, creo, con un parámetro social.
Se me ocurre que la integración del afuera y el adentro es la tendencia natural, y quien falsea sobre su imagen buscando la aceptación posiblemente falsee en muchas otras áreas de su personalidad para tras el mismo objetivo.
De esto se trata, la foto como reflejo de lo que no soy pero quiero pasar como si lo fuera. La no aceptación de lo que realmente soy y de quienes esten dispuestos a aceptarme de esa especial y única manera.
Que al fin y al cabo la belleza física y personal son tan relativas al ser que las posee como a quienes las admiran.

12:02 a.m.  
Blogger Abril Lech said...

* FGiucich: Cuán dificil es mostrarnos! Demasiados miedos nos juzgan. Jueces nombrados por nosotros mismos...

* Andrés: Pensaba justamente hoy cuando volvía manejando que lo voy a mandar a tu correo privado. cada tema me provocó algo diferente. Gracias por la paciencia. Gracias por los cumplidos, de parte de todas las monitas que somos de carne y hueso, algunas mas vampiras que otras, jejeje. Yo no ando mordiendo porque si en la yugular... o le han dicho lo contrario? ¡No es verdad!. Siempre tengo mis razones. :-)

12:05 a.m.  
Blogger Abril Lech said...

* Gracias poeta por el cumplido. Dice un dicho que contaba alguien que justamente no había sido favorecido por la belleza pero sí por el ego y eso suplía lo que natura no daba:

"La belleza es superficial. Pero la fealdad llega hasta los huesos."

Yo pregunto: ¿quién define qué es qué? ¿Se acuerda las bellas feas de Almodóvar? ¿Y las bellas de Rubens? ¿Qué publicista las contrataría hoy?

12:07 a.m.  
Blogger Ángel Fondo said...

Abril. ¡Cómo me gustó este texto!
No tengas duda alguna de que mi media foto enseña el lado bueno, que en realidad es el lado que me gusta enseñar. Pero a pesar de lo mayorzote y arrugadito que me voy poniendo con todos esos años endemoniados adelantándome con mas rapidez que Alonso a Massa, a pesar de eso tengo un medio adolescente por ahí dentro metido que es capaz de decirte: guapisima…gracias por tu desparpajo y más, muchísimas más gracias por tu naturalidad.
Un beso, mi niña…

8:02 a.m.  
Blogger Abril Lech said...

* Robin: Mi querido Robin, con todo desparpajo te diría -y afirmo- que tu media foto enseña un costado más que apetecible y por si solo basta. No lo digo sólo porque soy una dama y no corresponde decirle a un señor lo hermoso que es con su media imagen detrás de la ventana de la vida -a mi me pierden las ventanas, puede ser eso- lo de las arrugas no disminuye belleza alguna. Ni de adentro ni de afuera. Que de última existe el botox, jejeje. Gracias por el post... y por llamarme niña, ayyy, eso fue lo más lindo!!!

(Lo de Alonso, veremos que sucede en las próximas, verdad? Me parece que Hamilton lo tiene a mal traer...)

3:42 p.m.  

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