Bello Abril

Nos pasan tantas cosas en la vida, que si aparece el sol hay que dejarlo pasar... Abril, otra vez, para que no tengamos soledad. Y las violetas que coronan tu tristeza y las guirnaldas de tu inmensa soledad sos tan hermosa que jamás vas a dejar de brillar así aquí o allá... Sos parecida a los planetas que se mueven por ahí que no podés parar ya nunca de girar... Para que no tengamos soledad... para que no tengamos nunca más soledad... Fito Paez.

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Nombre: Abril Lech
Ubicación: Buenos Aires, Argentina

jueves, septiembre 16, 2010

Lavado de dólares

Por fin entendí lo que era el lavado de dólares al leer esta nota. Parece que en Zimbabue la gente lava los dólares con agua y jabón para evitar los malos olores. Luego de pasar un ciclo de 45 minutos en la lavadora, la figura que aparece en los billetes de un dólar sale mucho más limpia.

En África, al igual que en otros países de economías emergentes, los billetes estadounidenses de baja denominación cambian de manos hasta que se deshacen. En los barrios mas pobres la gente los esconde usualmente entre la ropa interior y los zapatos, así muchos billetes terminan oliendo bastante mal, algo que se soluciona metiéndolos en la lavadora junto a las sábanas y otras prendas.

Es la mejor solución en un continente donde el dólar ha sido desde hace tiempo la moneda de más circulación y donde la vida de un billete excede por mucho lo que prescribe la Reserva Federal.

El año pasado, el gobierno de Zimbabue oficialmente declaró al dólar estadounidense como moneda legal en el país para erradicar una inflación récord de miles de millones de puntos porcentuales del dólar zimbabuense al desplomarse la economía.

Los zimbabuenses dicen que la mejor manera de rehabilitar los billetes estadounidenses es lavarlos suavemente a mano en agua tibia. En cambio afirman que el lavado en seco no es recomendable, pues le quita algo de color a los famosos "billetes verdes".

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7 Comments:

Blogger Cecy said...

Que curioso!
Algo nuevo que aprendo.
Por las dudas no lo voy hacer, a ver si los nuestros se nos desintegran.
jeje

Besos Abril.

4:54 p.m.  
Blogger Alyxandria Faderland said...

La verdad es que mis golondrinas podrian haber traido unos billetitos de su viaje de California; las mias ya llegaron y entraron de una a su nido! El año pasado llegaron tambien tarde, tanto que desesperaba por ellas, si les habria pasado algo... Hace ocho años que una pareja anida, no se si seran las originales, o las hijas, pero la parejita nunca falla, y el año pasado nacieron dos pichones:veremos este año que pasa.

11:49 p.m.  
Blogger Pedro J. Sabalete Gil said...

Hola, gracias por tu visita.

Verás, visité el Banco de España cuando aún existía la peseta. En toda una planta recopilaban los billetes viejos tras unos años de circulación (creo que 5) para destruirlos sin importar el estado. Por cierto, las mejores máquinas trituradoras eran las italianas pues los despedazaban de manera aleatoria y recomponerlos era tarea imposible. Las peores las alemanas que lo hacían de una manera rápida pero ordenada.

Esto dice mucho de las características que atribuimos a cada pueblo ¿verdad?

Pues bien, que me pierdo, además de esa nota simpática y de poder tocar y llevarme confeti de billetes lo que más me sorprendió fue el hedor.

Era tremendo...horrible: una especie de añejo sudor cocido, a roña humana.

Así que creo que pasa en todos los lugares aunque desde luego en África los billetes están muy estropeados, te lo aseguro.

Saludos.

10:38 a.m.  
Blogger fgiucich said...

Hay otros que lavan de otra forma y hacen fortunas. Abrazos.

2:35 p.m.  
Blogger Ernesto Líneas said...

Pues yo como también estoy aseando mi casa, me he permitido añadirte en mis enlaces. Y de paso no te pierdo.

5:21 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

post impresionante. Realmente disfruté la lectura de su blog.

2:24 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

hola, Chicos, Bonito mensaje fuerte. Nunca pensé que era tan fácil. ¡Buen trabajo!

4:28 p.m.  

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