Huele mal
Huele muy mal. Tiré la basura, busqué y busqué... Descubrí la causa recién temprano al hacer el desayuno, entendí las señales de los últimos días. Y me sentí muy triste, además de que no se bien qué se supone que debo hacer...
Es que hace unos días atrás, justo cuando los chicos se iban con el papá de vacaciones, las golondrinas estaban tan alteradas que volaban delante de la ventana como locas, chillaban, iban y venían... Los gatos de mi mami y los perros de mis amigas entienden cuando los chicos de la casa se van de viaje, huelen las valijas, temen ser abandonados. Pero ¿los pájaros?
Y desde ayer el olor tan fuerte a carne en mal estado...
Yo en los últimos meses casi he sido vegetariana, pero justo hace unos días (por el tema de la anemia) decidí comer carne antes de enfrentar las vacaciones. Asi que busqué si se debía a la bandeja sucia, o la posibilidad de manchas de sangre de los bifes... no, todo limpio e impecable.
Al mismo tiempo van tres mañanas que me llama la atención que no me acompañen la golondrinas al hacer el desayuno. Incluso pensé si este año habrían partido antes de tiempo porque había dejado de verlas entrar y salir del nido...
Es que algún pichoncito se les ha muerto... No comprendí la alteración de aquel día, debía haber estado enfermo, lastimado, no se... pero se ve que se ha muerto, se está descomponiendo y elllas se han marchado.
Tengo tristeza de que ya no vuelvan a este nido en el que fueron creando una dinastía los últimos 10 años, para mi eran todo un simbolo de permanencia en un mundo donde todo dura cada vez menos... y además no se bien qué hacer con el cadáver. La salida es por afuera y me da impresión de sólo pensarlo. Además está lleno de unos moscones grandes, asquerosos...
Cada día que pasa de este año es una nueva sorpresa, oscura. Y eso que yo ni siquiera creo que el 31 de Diciembre comience realmente un año nuevo...
Etiquetas: animales, Año Nuevo, días especiales, golondrinas, naturaleza
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