Cierre de la Feria del Libro

Hoy cerró la Feria del Libro entre las fanfarrias de del Regimiento I de Patricios (creo, no lo vi pero lo escuché), los gritos y los aplausos de los empleados de los stands que estaban agotados de tantos días de intenso trabajo.

Las conclusiones finales del Secretario General de la Fundación que organiza la muestra fueron que hubo una caída de visitantes del 6 por ciento en relación al año pasado. Lo atribuyó a la crisis y al tiempo lindo en la ciudad de Buenos Aires.

Yo coincido en lo del tiempo, sólo aplicable al fin de semana. No creo lo de la crisis que aún no se ha hecho sentir en forma determinante en Buenos Aires. Pero en cambio si me parece decisivo que los últimos años la Feria fue muy cara y creo que ese recuerdo hizo desistir a más de uno.

El año pasado, por ejemplo, cada gaseosa para clamar la sed era un asalto a mano armada. Los libros estaban caros y ni hablemos del estacionamiento, que parece que uno estuviera firmando un boleto de compraventa.

Este año en cambio hubo muchas ofertas de libros interesantes o clásicos desde $ 10.-, así como colecciones enteras. Pero es evidente que los organizadores no han pensado en promociones que entusiasmen e inciten a regresar en este mismo período, lo que naturalmente redunda en ventas, porque uno se entusiasma.

A mi se me ocurren dos ideas. Una es que con cuatro entradas de días diferentes -las que junté yo por ejemplo- la quinta sea gratis. Conozco mucha gente que va repetitivamente. Otra es el tema del estacionamiento, que es carísimo, se puede hacer que con tikets de compra de libros superior a determinada suma haya un descuento interesante

La promoción que figura detrás de la entrada -descuento en una compra mayor a $ 120.- en un mismo stand- prácticamente no es aplicable. No responde, a mi criterio, a la realidad de la mayoría de la gente que diversifica sus gastos en distintos stands.

En cuanto a las actividades este año me parecieron menos atractivas que los anteriores, si bien leo en algunos medios que la gente participó mas. Se referirá a los actos culturales que fueron muy interesantes. Me pareció especialmente atractivo para el público que contemplaba hipnotizada tras los vidrios, la existencia de dos radios con transmisión en vivo, la Radio Pública y Radio Mitre.

Desde lo estético los stands cada vez son mas lindos, los pasillos amplios, cómodos y fáciles de identificar con el tema de las alfombras de colores para cada sector. Hoy justo recordaba las primeras ferias que fui, cuando se hacía atrás de la Facultad de Derecho, en el Centro Municipal de Exposiciones, ¿alguien se acuerda?

Caminar por los estrechos pasillos era todo un tema. Y uno encontraba en la Feria del libro cosas rarísimas dificiles de ver en cualquier librería. Era una de las razones que más atraían a los lectores. Tengo libros en mi biblioteca que son una maravilla, traido de otros paises, imposible de acceder en circunstancias normales. Hoy todo eso parece tan lejano...