Somos responsables por los otros
Me llegó esta tristísima imagen con el siguiente texto: "Make ONE resolution for Year that DO Not waste Money in unnecessary things. Pl. Help those who are in need"
(Haga una resolución para este año, no gaste dinero innecesariamente. Por favor ayude a quien lo necesite)
(Haga una resolución para este año, no gaste dinero innecesariamente. Por favor ayude a quien lo necesite)
El chico que me lavaba el pelo en la peluquería se quejaba amargamente de lo mal que había pasado las fiestas, sólo en su departamento porque su familia es del interior y él vino a la Capital a trabajar y estudiar. Repetía una y otra vez lo terrible que es pasarla solo.
Cuando ya retomaba la letanía por cuarta vez le pregunté si en ningún momento se le había ocurrido esa noche participar de los muchos grupos que en navidad y Año Nuevo van repartiendo alimentos y bebidas para brindar con la gente que vive en la calle.
Me miró asombrado, nunca se le había pasado por la mente salir de su AUTOCOMPASIÓN y transformarlo en un ACTO SOLIDARIO. Amén de agradecer que tuviera la salud y la posibilidad de venir a la capital a estudiar, tener una vivienda, la posibilidad de crecer en su profesión, etc.
En otra escala creo que nos pasa a todos. Demasiado ensimismados en nuestro mundito de cuatro por cuatro no alcanzamos a ver la posibilidad que tenemos de hacer felices a otros compartiendo algo de nuestro tiempo, nuestro dinero, nuestro don, nuestro trabajo, lo que sea.
Antiguamente existía en algunas religiones la Institución del diezmo, que creo aún conservan algunas Iglesias, de dar el 10% de todas las ganancias.
No lo pensemos en términos económicos, aunque tampoco está mal compartir nuestro dinero, a veces es la salida más fácil. Pero imaginemos cómo sería dar un 10% de nuestro conocimiento, un 10% de nuestros dones, un 10% de nuestro tiempo, un 10% de nuestro trabajo... lo que sea... en ayudar a otros y contribuir a que el mundo sea un mejor lugar para vivir.
¡Qué pasa si probamos un mes y vemos qué se siente?
Todo aquello que se da vuelve multiplicado. Hagan la cuenta, es imposible no acercarse a la plenitud en la donación transformadora de salir de uno mismo y abrirse a los otros para DAR.
Tomar conciencia, dar una mano, hacer una diferencia, es lo que podemos aportar a este 2011.-
Y podemos empezar ya mismo.
posted by Abril Lech
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| 10:00 p.m.
9 Comments:
Sobrecogedor.
"Cuentan de un sabio que un día..."
Gracias por recordarnos que hay cosas más importantes.
besos
Vos sabes Abril que la idea es maravillosa y llevarla a cabo mejor aún.
Yo creo que es una de las cosas que más feliz me hace, ayudar al otro.
Soy de una clase media, pero todos los años tengo mi protegida, una escuelita del bajo flores donde muchos chicos desayunan y almuerzan alli, hasta que sus papás los retiran despues de su jornada de trabajo.
Ayuda es sinónimo para mí de sentirme satisfecha, de saber que puedo ser mucho mas feliz haciendo sentir mejor a alguien (aunque sea una ayuda temporal y jamas definitiva del problema)
La imagén es muy fuerte, pero hay tantas en nuestras calles y en las de muchos países mas...
Besotes Abril, creo que hacer bien al otro es hacernos bien a nosotros mismos!!!
* De cenizas: Ciertamente la foto impresiona, pero más aún impresiona los actos cotidianos de egoismo que todos nosotros tenemos -y ni siquiera ya tomamos conciencia- donde no nos damos, ni damos todo aquello que somos y que tenemos sin mérito muchas veces para ello. ¿Qué hizo que naciéramos en una familia que no permitiera que estuviéramos en ese estado de los niños de la foto? Gracias por pasar y comentar!!!
* Sonia: ¿Y no es cierto que cada pequeño gesto nos vuelve en felicidad inmensa y profunda hacia adentro? Yo también creo que los actos por otros nos benefician más a nosotros mismos... Uno de mis hijos algunos fines de semana los destina para construir casas en ese plan que se llama "Un techo para mi pais". Una noche de domingo, diciembre pesado transpirado hasta la médula, volvió muy conmovido a casa y se sentó a contarme todas las cosas que les había dicho el padre de familia en agradecimiento por el gesto. Se le caían las lágrimas, decía que él había aprendido en las palabras de este humilde hombre más que en los estudios de los últimos meses... Mientras hablaba yo veía a mi hijo iluminado, pleno, inmensamente conectado con lo profundo del ser humano y con pleno sentido de lo que el paso por esta vida significa para el alma propia. Y a decir verdad me sentí orgullosa de haberle podido transmitir algo tan simple pero tan vital para sí mismo, mucho mas allá del bien que él pudo hacer. He conocido gente que dice no saber qué es la feclidad. Son Egoistas Perpetuos, quejosos permanentes de los otros que los rodean, criticones eternos, emitiendo juicios y sentencias sobre todos y todo, que miden milimétricamente los flujos del dar y recibir, incapaces de conocer el valor de brindar bienestar sólo porque si... Si cada uno pudiera dar un 10% de sí mismo por el sólo dar, sólo por eso...
Es impresionante la foto, Abril. Debemos tomar conciencia de estas situaciones y empezar por algo. Abrazos
Y es que no es sólo esa imagen, cada día podríamos conmovernos con lo que vemos a nuestro alrededor o en los medios...y con algo realmente insignificante para nosotros se puede hacer tanto.
Gran verdad...si cada uno de nosotros cediéramos muy poquito de lo nuestro...el mundo no sería así.
Gracias por visitarme
Hola, que alegría y gusto leerte Abril. Me impactó la imagen, y pienso que éso lo que busca....RE-MOVER....y llevarnos a la acción.
Salir de nuestra "comodidad" y participar en encuentros que motiven acciones para nuestro prójimo...
Gracias mujer por este "golpecito en el hombro"...;-)
Un abrazo,
Ali
dar y recibir, muy importante.
Gracias por escribir esto.
Besos.
No siempre tenemos el alma a mano para brindarles a los demás. Abrazos.
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